Cero Grados.-El migrante haitiano Austin Pascal Dubbisson recomienda no juzgar a los hondureños por su color de piel o por su acento “porque todos somos iguales”. También comentó que ningún migrante “deja su país por gusto”, sino que salen huyendo porque su nación ya no tiene nada bueno que ofrecerles.
Así se expresó Austin Pascal al presentar su libro Sobrevivientes. Ciudadanos del mundo, en el espacio de Vida Universitaria con alumnos de la Licenciatura en Psicología de la Universidad de Tijuana CUT, tras invitarlos a ser más sensibles ante las necesidades de los migrantes centroamericanos y apoyarlos con ropa, alimento y trabajo.
“Yo quiero decir algo sobre los hondureños, ojala que la gente, que los alumnos que estoy viendo aquí no sean igual a las personas que estoy viendo en Facebook porque no podemos juzgar, somos todos iguales. Tal vez puedan venir personas malas en la caravana pero no estamos para juzgar”, sostuvo el estudiante de Derecho en la Universidad Estatal de Haití en Puerto Príncipe.
También dijo que entre sus compatriotas haitianos que llegaron a Tijuana también pudieron venir “personas malas”, pero al quedarse en México han logrado cambiar muchísimo porque están trabajando. “Saben por qué eran malos, porque no tenían nada que hacer allá –en Haití- y aquí se les ha dado la oportunidad de hacer muchas cosas”.
Resaltó que los migrantes hondureños salieron huyendo de su país porque fue lo único que les quedaba por hacer “nadie deja su país por gusto. Tú crees que los niños y las mujeres embarazadas tienen la culpa de estar aquí, ellos están huyendo de Honduras, pero su país estará siempre en su corazón, en su sangre”.
Dubbisson recordó que hace dos años, cuando los haitianos llegaron a Tijuana, también sufrieron críticas y malos tratos pero ahora, con la llegada de la caravana de hondureños, las cosas –para los haitianos- han cambiado “ahora son buenos, trabajadores y están estudiando” y esto se deba que “nosotros –los haitianos- estamos probando lo contrario a lo que pensaron. Igual puede pasar con los hondureños”, apuntó Austin Pascal al tiempo de cuestionar cuál es la diferencia de un migrante con los mexicanos, un papel y el acento. Yo creo que todos somos iguales”, finalizó.
La presentación del libro Sobreviviente. Ciudadanos del mundo, se realizó en el Salón de Usos Múltiples del CUT, Campus Altamira. El evento fue presidido por la Maestra Yeni Marmolejo Mariscal, Vicerrectora de la Universidad, acompañada de la Psicóloga Carolina Reyes Ávalos, Coordinadora de la Licenciatura en Psicología, además de docentes y administrativos de la institución educativa.
Sobrevivientes. Ciudadanos del mundo, es un libro en el que el autor narra cómo miles de haitianos salieron de su país hacia Brasil y Chile en busca de mejores oportunidades. Estos países entran en crisis económicas y se ven de nuevo en la necesidad de recorrer diez países para llegar a Tijuana y cruzar a Estados Unidos. Durante su trayecto sufrieron de hambre, sed, frío, cansancio físico, fueron abusados, padecieron violencia, les robaron sus pocas pertenencias y algunos quedaron en el camino. De los que sobrevivieron, unos lograron su objetivo de vivir el “sueño americano” pero otros hicieron de Tijuana su hogar y han retomado su vida, encontraron trabajo y empiezan a formar familias. Ahora ellos se hacen llamar “haitijuanenses”, así ya son alrededor de 60 niños que han nacido en esta tierra mexicana.
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