De acuerdo con fuentes del Gobierno federal, la PGR busca al ex mandatario, luego de que un juzgado de distrito con sede en Jalisco libró la orden de captura por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
El delito que le atribuyen a Yarrington “ahora prófugo de la justicia” es calificado como grave, lo que le impediría suspender la orden de captura mediante un amparo; al mismo tiempo, un proceso por este ilícito también cancelaría de antemano su derecho a salir en libertad provisional.
Desde el 6 de abril de 1999, en que se ordenó capturar a Mario Villanueva Madrid, ex mandatario de Quintana Roo, la Procuraduría no había ejercitado acción penal en contra de ningún ex gobernador, por acusaciones relacionadas con el narcotráfico.
El 17 de agosto la SIEDO consignó ante el Juzgado Séptimo de Distrito en Jalisco al empresario Napoleón Rodríguez de la Garza, presunto prestanombres del ex mandatario tamaulipeco a quien le inició un juicio por portación de arma de fuego y le otorgó la libertad bajo fianza, porque el delito no es grave.
Testigos protegidos
Según fuentes federales, la acusación contra Yarrington se basa en los testimonios de los testigos protegidos “Ángeles”, “Óscar” y “Pitufo”, así como en las declaraciones de uno de sus ex administradores de bienes cuyo paradero y estatus legal se desconoce.
En la averiguación previa se incluyen los testimonios de la también testigo protegido Zonia de Pau García, ex esposa de Fernando Cano Martínez, quien es prófugo de la justicia estadounidense, por ser el presunto “lavador” de Yarrington.
Otras personas cuyas declaraciones fueron usadas por la PGR contra el ex gobernador son las de Napoleón Rodríguez de la Garza, quien confesó a las autoridades ser el prestanombres de Yarrington en la compra de un departamento de 450 mil dólares en Texas.
De acuerdo con fuentes policiales, desde marzo Yarrington abandonó el país pero se desconoce su paradero.
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