Sin embargo, desde principios del 2011 descubrió que además los cárteles secuestraban a los operadores para amenazarlos directamente y de esa forma trabajaran para ellos, al igual que los supervisores, quienes tienen mayores niveles de vida que los permitidos por sus ingresos laborales en el gobierno.
La mayoría de los secuestros contra los operadores son exprés, saliendo de su centro de trabajo, o por dos días, en autos; la coerción es física o psicológica y el impacto es alto debido a que los salarios son bajos, y eso provoca que por miedo o dinero acepten colaborar con el crimen, se indica.
En el caso de los estados de Coahuila, México, Morelos, Puebla, Nuevo León y Chihuahua, el número de casos de operadores de los call centers de denuncia anónima secuestrados por la delincuencia aumentó, pero las víctimas no presentaron queja.
Al respecto, Luz del Carmen Díaz Galindo, titular del Centro Nacional de Certificación y Acreditación del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, informó que debido a esas amenazas y otras de mayor magnitud, se han tenido que reubicar a personal junto con sus familias.
Díaz Galindo precisó que el personal que han evaluado a nivel nacional ha recibido amenazas de parte del crimen, “es muy claro que en los estados donde hay mayor incidencia delictiva, el riesgo es mayor, porque están confrontando”.
ENTÉRESE
Según información de la DEA, en estados como Coahuila, México, Morelos, Puebla, Nuevo León, el número de casos de este tipo aumentó.
En estos casos el personal reporta a su institución y el Centro Nacional de Certificación y Acreditación del SESNSP,hace un reporte o una recomendación para que tomen medidas de protección y después procede la PGR.
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