“Si bien es cierto que la paciente tiene la responsabilidad primordial de cuidar su salud durante la gestación, a la par el personal de salud acompaña y debe estar preparado para identificar riesgos y atender de forma correcta una posible emergencia obstétrica, que se puede presentar en cualquier trimestre”, señaló el galeno.
El programa académico contempla los siguientes temas: Mortalidad Materna, Triage Obstétrico y Código Mater, Hemorragia Obstétrica, Taller de Reanimación Materna, Reanimación Neonatal, Distocia de Hombros, Taller de Pre Eclampsia y Complicaciones.
Este curso- taller se realiza tres veces al año y contempla atender a grupos de 60 trabajadores de todos los turnos y jornadas laborales del nosocomio que serán actualizados en conocimientos y estrategias en la materia.
“Hablamos de emergencia obstétrica cuando la condición de salud de la madre, neonato o ambos, los pone en peligro de muerte y requiere además maniobras especializadas o quirúrgicas de forma inmediata”, explicó.
La Organización Mundial de la Salud establece que las causas principales de emergencia obstétrica son: hemorragia durante o después del parto, sangrado durante el embarazo, parto o postparto, trastornos hipertensivos, parto obstruido o parto prolongado y aborto, que se manifiesta por sangrado en el primer trimestre del embarazo, entre otras.
“De igual forma, este organismo estima que anualmente, a nivel mundial del 15 a 20%, de los embarazos pueden complicarse aún sin causa aparente, favoreciendo una emergencia obstétrica”, detalló Rojas Serratos.
Los riesgos durante el embarazo siempre estarán presentes, por ello, el control prenatal es fundamental para monitorear el desarrollo de la gestación. Esto permitirá no sólo prevenir una emergencia obstétrica, sino capacitar también a la madre para que identifique oportunamente los signos de alarma y así se pueda realizar una intervención oportuna.
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