En la última sesión ordinaria, registrada el jueves 5 de julio, la
Diputada ensenadense señaló en la exposición de motivos de la propuesta que los
adultos mayores requieren de distintos servicios públicos y las entidades de
gobierno deben velar por que el acceso a los mismos sean eficientes y de ser
posible que no tengan costo o que dicho costo sea menor, debido a que este
sector de la población, se encuentra en muchas ocasiones en desventaja e
incluso en vulnerabilidad, respecto a las personas jóvenes y adultas.
“Las personas mayores requieren entornos de vida facilitadores y de apoyo
para compensar los cambios físicos y sociales asociados al envejecimiento. Esta
necesidad fue reconocida como una de las tres directivas prioritarias del Plan
Internacional de Acción sobre Envejecimiento de Madrid, avalado por las
Naciones Unidas en el 2002”, aseguró.
Agatón Muñiz agregó que es imperante el lograr que las ciudades sean más
amigables con los adultos mayores, pues constituye una respuesta necesaria y
lógica para promover el bienestar y el aporte de los residentes urbanos de
mayor edad y mantener ciudades prósperas. Y toda vez que el envejecimiento
activo es un proceso que dura toda la vida, una ciudad amigable con los mayores
es una ciudad para todas las edades.
“En Baja California, este poder legislativo a través de ordenamientos
legales de carácter estatal, ha impuesto diversos beneficios para los adultos
mayores que van orientados a otorgar descuentos e incluso la gratuidad en el
pago de servicios públicos y derechos, particularmente en aquellos ligados a la
salud. Sin embargo, personas de la tercera edad residentes de la Ciudad de
Ensenada, nos hicieron la petición de que por una parte se construyan más baños
públicos y que se les otorgara la gratuidad del uso de sanitarios en parques
públicos”, manifestó.
La Diputada Claudia Agatón expuso que muchas personas de la tercera edad se
reúnen en parques públicos y por sus condiciones de salud, requieren de usar
con frecuencia los sanitarios y el cobro de los mismos si les impacta en su
precaria economía. Pues en la mayoría de los referidos lugares los sanitarios
públicos exigen un cobro por el uso de los mismos, argumentando que ese cobro
es para garantizar un adecuado mantenimiento de los mismos y para solventar el
pago de agua que se consume en los mismos.
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