miércoles, 18 de marzo de 2015

La rinconera‏

NI PRENDE…NI APRENDE
 Por: Fernando Ruiz del Castillo
Lo ocurrido este martes 17 de marzo en el sur del Municipio de Ensenada, donde cientos de jornaleros agrícolas tomaron la carretera y bloquearon el paso entre Baja California y Baja California Sur, es una muestra más de que en el Estado hay un gobierno que ni prende…ni aprende.

Era cuestión de tiempo para que los trabajadores agrícolas, uno de los grupos más explotados por los terratenientes de la región, muchos de ellos ex funcionarios y funcionarios de la actual administración panista estatal, estallaran en demanda de mejores condiciones de vida, servicios y atención de los tres niveles de gobierno.
Desde hace varios meses diversos medios de comunicación nacionales y regionales dieron –dimos- cuenta del caldo de cultivo en el que se había convertido esa zona agrícola dadas las condiciones infrahumanas en las que trabajaban familias enteras, incluyendo niños, en los fértiles y extensos campos de San Quintín, Camalú y Vicente Guerrero.
La presencia de grupos guerrilleros que amenazaban con desestabilizar la delicada situación política y social de la región, quedó asentado en las diversas publicaciones.
Pero nadie en el Gobierno del Estado, como responsable de la paz social y política en Baja California, ni de la administración anterior y mucho menos de la actual, quisieron actuar de fondo tal vez para no incomodar al entonces secretario de Fomento Agropecuario, Antonio Rodríguez, propietario de exitosas empresas establecidas en San Quintín.
Hoy el problema le estalló en las manos a Francisco Vega de Lamadrid quien no supo ni por donde le llegó el golpe pues, al parecer, ni enterado estaba y seguramente ni siquiera quería saber, de los graves problemas sociales que se viven en esa importante y rica zona productiva nacional.
El peligro de un estallido social en San Quintín ha estado presente desde hace varios años pero hoy, como nunca, las condiciones están dadas para que el conflicto se potencialice a niveles que pondrían en peligro la estabilidad política y económica de Baja California.
Legítimos movimientos están siendo aprovechados por grupos extremistas para infiltrarse, provocar daños, alterar el orden y generar enfrentamientos que les dejen sus primeras víctimas para usarlas como banderas en la lucha contra la represión.
Pero ni Kiko supo ni sabe porque tampoco tuvo nadie que le informara con tiempo lo que en San Quintín, Camalú y Vicente Guerrero estaba ocurriendo, hasta que se le vino el mundo encima y ahora sí, ofrecer la reanudación del  diálogo.
Pero si de ser justos se trata, también hay que dejar en claro que gran parte de esa responsabilidad e informar de lo que ocurre con la seguridad interna le corresponde al Secretario General de Gobierno, Francisco Rueda Gómez, quien por lo visto anda más ocupado promoviendo la candidatura de su esposa que atendiendo los asuntos inherente a su importante cargo.
¿Cómo es posible que la situación haya llegado a estos extremos y sea hasta ahora cuando el Gobierno de Baja California convoque a los jornaleros agrícolas a reanudar el diálogo? ¿Era necesaria la violencia para que los tomaran en cuenta?
¿No hubo quien les acercara al señor gobernador y a su secretario de Gobierno copias de los artículos publicados en diversos medios en donde se daba cuenta casi exacta de la cruda realidad que viven campesinos traídos de diversas partes del país para ser literalmente esclavizados en los campos agrícolas del sur de Baja California?
¿No hubo, no los encontraron o no quisieron molestarlos?
Hoy San Quintín, Camalú y Vicente Guerrero se han convertido en el centro de atención regional y no tardará, si el Gobierno Estatal no tiene la capacidad de negociación suficiente para resolver pronto el conflicto, en captar la atención nacional e internacional.
Lo que ha dejado claro este nuevo problema en la administración de Kiko Vega es que no solo trae serios problemas de imagen y comunicación, sino está claro que en materia de información y análisis de conflictos políticos y sociales todavía ni prende…ni aprende.

Ahh y como una aportación, les sugerimos revisar los artículos que abajo aparecen, dándoles link en cada uno de ellos.

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