Más que en cualquier otra época actualmente existen potencialmente muchas sustancias disponibles que pueden inducir, de forma directa o indirecta, efectos sobre la conducta sexual; el acceso a ellas es relativamente fácil y el conocimiento de sus efectos empieza a estar muy extendido, sobre todo gracias a la información que se encuentra en internet.
Se calcula que hasta un 17% de las agresiones sexuales podrían catalogarse como casos de suministro ilegal de sustancias psicoactivas, por lo que se requiere apoyar a la víctima a través de un médico forense, que en el momento del examen clínico puede advertir síntomas no específicos, habitualmente neurológicos, dado el estado de aturdimiento en el que se encuentran las víctimas.
Por tal razón, el diputado Ramón Vázquez, indicó: “proponemos adicionar el Artículo 183 Ter al Código Penal del Estado, para que se considere como una agravante a los delitos de Violación, Violación Equiparada, Violación Impropia, Abuso Sexual, y Estupro, la suministración de estupefacientes o psicotrópicos a la víctima, en contra de su voluntad o sin su consentimiento, conservando la sanción ya estipulada en los citados artículos relativos los referidos tipos penales y aumentando hasta en una mitad en su mínimo y máximo”.
“Sabemos que falta mucho por hacer, pero con esta adición legislativa estamos cerrando lagunas a casos que se presenten o se pudiesen presentar en la actualidad y no queden impunes”, finalizó.
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