Expediente Político

Por.- Alfredo Calva


Tras Cotuco

Si después de más de dos décadas de ejercer un nocivo y dañino cacicazgo en Playas de Rosarito, en beneficio de sus intereses particulares y familiares, en este inicio de año no tiene por qué cambiar ésta situación, por lo tanto, y tras un momento de meditación profunda y sesuda (por aquello de decidir cual títere utilizar) Hugo Torres Chabert, decidió designar a Manuel Padres, actual responsable del CCE (Consejo Coordinador Empresarial) en Rosarito, como aspirante a candidato a la dirección del Cotuco (Consejo de Turismo y Convenciones) rosaritense.


Haciendo un preámbulo, hay que señalar la situación que se guarda en el quinto municipio con respecto al tema, a la par que Hugo Torres, ha ejercido con singular alegría el cacicazgo, sus marionetas y títeres llevan el mismo tiempo obedeciendo y succionando de sus caprichos y estólidas decisiones, sin que hasta el momento sean pocos los que se han atrevido a destetarse del decrepito político y fallido empresario.

El control y manipulación que ha tenido Hugo Torres de sus coreutas y de los organismos en los que se agrupan el sector productivo rosaritense, le han permitido gozar de las exquisitez que brinda utilizar los recursos públicos en favor de su negocio, del que por cierto se apropio, y de evitar el desarrollo y la diversificación económica de Rosarito. 

Pero retornando al tema de la unción de Padres como el alfil de Torres Chabert, diremos que el aun titular del CCE no cuenta con el perfil, la experiencia, capacidad y voluntad de desempeñar el puesto que le pretende indilgar su jefe político, prueba de ello la dio el pasado miércoles en sesión ex profeso en las instalaciones de la Canaco, cuando el delegado de ese organismo, Javier Rodríguez, lo destapo como aspirante a presidente de Cotuco.

Al ser cuestionado por los asistentes al evento respecto a su proyecto de trabajo, Manuel Padres, no solo titubeo, sino que se le hizo bolas y grandes, el engrudo, es decir, fue un fiasco, mostro y demostró lo que todos suponían desde el inicio al conocer la postulación de él, que solo era por dar satisfacción a quien los controla y dirige en el municipio, Hugo Torres Chabert.

Es lamentable que se presente este tipo de situación dentro del sector empresarial, son muchos años que todos los organismos que aglutinan a los comerciantes y empresarios, sean ocupados por quien designe Torres Chabert, y que todos con pasmosa sumisión han, sigan y por lo que se ve, seguirán aceptando con callada obediencia. 

Lo anterior es grave, pero aberrante es, que existe otra opción para Cotuco que puede ser benéfica para Rosarito, Víctor Loza, un personaje cuya grave deficiencia es, que no comulga con los intereses del cacique, es un antagónico de Torres Chabert, por lo que se vislumbra casi imposible que logre el consenso de los doce personajes que tienen a su cargo la elección del presidente de Cotuco, porque la mayoría de ellos, no tienen lo que hace falta para sacar avante este municipio en su competencia, la determinación y arrestos para cambiar las cosas.

Difícil que se desteten.