miércoles, 1 de marzo de 2017

Expediente Político

Por.- Alfredo Calva

 Vientos de corrupción....

Tal parece que vientos de corrupción azotaran en el comité de concesiones del gobierno municipal del VII Ayuntamiento de Playas de Rosarito en los próximos días, cuando el ente electivo determine a que empresa asignará el contrato de prestación del servicio de arrastre de vehículos.


De acuerdo a lo que se escucha entre los colaboradores de los regidores representantes del PAN, los ediles azules asignarán el señalado contrato a la empresa Grúas Salceda, sin importar los serios señalamientos que esa empresa ha tenido por parte de el órgano de fiscalización del congreso del estado, que en su oportunidad, la anterior Sindicatura a cargo de Tomás de la Rosa,  trató de manera indolente y omisa.



Y, que en colaboración de los integrantes del cabildo del VI Ayuntamiento, le condonaron un crédito fiscal de casi un millón de pesos, en detrimento de las arcas municipales, como muestra de agradecimiento a su contribución sustancial a la entonces campaña política de Silvano Abarca Macklis.

Hoy, pese a que los señalamientos realizados por el organismo fiscalizador, la presente Sindicatura observa con coludido desdén el transcurrir del tiempo y el servil alineamiento de los ediles panistas aprestándose a designar a Grúas Salceda de nueva cuenta, como el proveedor del servicio de arrastre de vehículos.

De ejecutarse esta acción, lo que dan por un hecho los consultados, la administración de Mirna Rincón Vargas, se empezará a empañar la imagen y discurso de la primer dama en gobernar esta demarcación que fue punto toral de su campaña política electoral, de gobierno transparente sin tolerancia a la corrupción.

Por salud política y de protección a su credibilidad e imagen, la alcaldesa debe de exhortar al titular de la Sindicatura, Miguel Vila, cumpla con sus responsabilidades y ejerza a cabalidad el cargo que a través del sufragio los rosaritenses le otorgaron, y éste a su vez, exigir al responsable del área de Contraloría, quien por cierto se asume como Síndico de facto, José  Ciprés Tinoco, actué de manera profesional haciendo de lado sus desplantes de puberto oligofrénico, para prevenir cualquier acción que lacere y vaya en contra del ordenamiento de la titular del ejecutivo municipal.

Tienen en el escritorio del Síndico lo relacionado al dictamen de condonación del crédito fiscal a las Grúas Salceda, aprobado vía cabildo, acción que no permite la ley de hacienda, en la que se estipula que cualquier persona física o moral que tenga un crédito fiscal con el gobierno local, aunque tenga algún saldo a favor, debe obligadamente cubrir su deuda y después reclamar su saldo a favor.

Sin importar lo establecido por el ordenamiento, los integrantes del cabildo del VI Ayuntamiento a través de un amañado dictamen elaborado por el departamento jurídico de ese gobierno, aprobaron el perdón de la deuda sin importar el daño que le generaron a las arcas municipales, pero lo hicieron como un acto de agradecimiento a todas las prebendas que les entregó el alcalde Silvano Abarca Macklis.

Lo anterior, fue ejecutado en la ultima sesión de cabildo de ese gobierno, y fue una clara muestra de lo que es ejercer la corrupción, con el pleno conocimiento de que no tendrá consecuencia algina.

Y mientras tanto….


La descomposición al interior de la policía municipal en Playas de Rosarito se agranda, sin que su titular tenga la capacidad para detener, revertir y establecer el orden y la armonía. 

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