Recordó que la unidad se distinguió durante la contingencia sanitaria por no suspender los procedimientos quirúrgicos de emergencia y dar seguimiento a la programación de aquellos que no pudieran postergarse por la gravedad del caso.
En el 2022, al declararse semáforo epidemiológico verde, se han reiniciado las programaciones quirúrgicas que durante los últimos meses pudieran estar en espera, como las salpingoclasias, que igual se estuvieron realizando a pacientes ya hospitalizadas por alumbramiento o aborto, aprovechando su estancia.
Al mes de mayo de este año, se han realizado tres cirugías en el área de neonatología. Por otro lado, un porcentaje de los nacimientos son posibles por la realización del procedimiento de cesárea, siendo 418 las operaciones de este tipo.
En el campo de la ginecología, se realizaron mil 685 intervenciones entre las que destacan salpingoclasias (ligadura de las trompas de Falopio), laparotomía (para exploración de condición abdominal), reparación de piso pélvico, legrados, embarazos ectópicos y las recomendadas para el tratamiento de cáncer cérvico uterino, como la histerectomía (extirpación parcial o total de matriz), por mencionar los más comunes.
La realización de estas cirugías requiere el compromiso y trabajo no sólo de personal médico y de enfermería sino de todo el equipo de la institución, que involucra actividades de limpieza, lavado de ropa, mantenimiento de equipo e instrumental, esterilización, abastecimiento de insumos, atención a familiares, entre otras áreas.
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