La jefa del servicio, explicó que, el reflujo es una enfermedad que se da por la inmadurez del tubo digestivo de un bebé y en ocasiones, se acompaña de una alergia a la proteína de la leche de vaca, sin embargo, dependiendo de la gravedad del padecimiento se brinda un tratamiento personalizado para cada paciente, que puede consistir en medicamentos o incluso una cirugía en caso de que el problema persista después de los 6 meses de vida.
En este sentido, Pacheco Simón, recomendó a las madres y los padres que tienen bebés con este padecimiento, cuidar la postura del menor a la hora de dormir y de alimentar, con la finalidad de prevenir una broncoaspiración, además, mencionó que, aunque existen fórmulas antirreflujo para alimentar a los lactantes, la leche materna es el mejor alimento para contrarrestar esta condición.
Asimismo, informó que, algunas de las complicaciones que puede presentar un bebé con reflujo son neumonías, broncoespasmos, esofagitis, poco aumento de peso, entre otras, por lo cual se recomienda mantener a los bebés con una postura inclinada, utilizando una silla portabebé o un cojín para reflujo.
Finalmente, la especialista señaló que aunque no hay manera de prevenir esta enfermedad, se puede corregir en los primeros meses de vida según sea la gravedad de la misma, y reiteró la importancia de mantenerse informados sobre los cuidados que requieren estos bebés.
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