Cero Grados.- A fin de reconocer el derecho de cualquier persona a ser tratada en sus adicciones, haya sido o no sentenciada por un delito, el Congreso bajacaliforniano aprobó una reforma a la ley de Prevención, Tratamiento y Control de las Adicciones para el Estado, presentada por el diputado tijuanense Marco Antonio Corona Bolaños Cacho.
"Todos merecemos encontrar una mano tendida, cuando un problema rebasa nuestras capacidades. Por ello, las personas que sufren una adicción, deben tener las oportunidades para recibir un tratamiento adecuado, en armonía con sus derechos", expresó el asambleísta tricolor.
Corona indicó que la citada reforma establece los derechos de las personas sujetas a tratamiento, a fin de que reciban uno acorde a su problema, manteniendo la confidencialidad en la información relacionada con este.
También plantea la extensión de una constancia gratuita sobre el tratamiento que haya seguido o esté siguiendo la persona, así como la elaboración de un expediente sobre el mismo.
"Al concebirse el tratamiento contra las adicciones como un derecho de las personas, será una obligación garantizar los recursos públicos necesarios para ello", delineó el congresista.
En virtud de lo anterior, la Secretaría de Salud implementará los servicios de asistencia médica, recuperación y desintoxicación; terapias grupales e individuales; farmacoterapia para reducir la necesidad imperiosa de consumir sustancias psicoactivas con potencial adictivo; orientación a la familia de la persona que sufre problemas de adicción; apoyo para la reinserción social, entre otros.
Además, con el propósito de garantizar el derecho de tratamiento contra las adicciones, se establece la posibilidad de que cualquier persona pueda denunciar, ante la Secretaría de Salud, las irregularidades que se den en los establecimientos especializados en su atención.
Además, los mismos deberán impartir capacitación para oficios.
Corona resaltó que la enmienda va de la mano con la Norma Oficial Mexicana NOM-028-SSA2-2009, misma que tiene por objeto establecer los procedimientos y criterios para la atención integral de la farmacodependencia.
"De las adicciones se originan diversos problemas sociales, como la delincuencia, o violencia y desintegración familiar. Por ello, es importante facilitar el tratamiento de las mismas, a través de una política integral, que considere todas las aristas, para así revertir la tendencia de incremento en el consumo, que ha registrado Baja California a lo largo de su historia", concluyó.
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