Por tal motivo, el director del Hospital Materno Infantil de Mexicali, José Rojas Serrato, exhortó a las mujeres embarazadas a cumplir con este mandato del reglamento de tránsito que no las excluye por su condición.
Explicó que es importante que revisen que el dispositivo de seguridad funcione correctamente y que se lo coloquen de forma adecuada, debiendo quedar un cordón por debajo del vientre y el otro cruzando por en medio de ambos senos. Esto dará una sujeción efectiva en caso de un accidente automovilístico.
“La banda abdominal debe ir lo más baja posible, sobre las caderas. Si el problema es que el cordón no es muy largo, existen en el mercado dispositivos para dar mayor longitud y se logre abrochar. La distancia a recorrer no importa, siempre se debe colocar”, agregó.
El cinturón de seguridad no es peligroso para el feto, ni incómodo si se coloca correctamente. Incluso con una velocidad que se considere moderada, podría ser fatal cualquier impacto contra el tablero o el asiento de enfrente.
Durante los primeros tres meses de embarazo, el golpe puede producir hemorragias en el útero por desprendimiento de la placenta y al ser escasa la cantidad de líquido amniótico, el bebé recibiría poco oxígeno.
En un embarazo en etapa más avanzada, el golpe por choque o frenado intempestivo puede causar parto prematuro o traumatismos en el bebé al golpear su cabecita con los huesos de la cadera de su madre.
En esta temporada vacacional y siempre, no importa en qué parte del vehículo viaje la mujer embarazada, el cinturón de seguridad podría salvarle la vida y la del bebé.
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