Expediente Político

Por.- Alfredo Calva

Hasta que al fin........

Finalmente se decidió el gobierno estatal de Oaxaca a través de su titular del ejecutivo, Gabino Cue, tomo la decisión de poner fin a décadas de secuestro de la educación en el estado, por parte de los maestros integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, sección 22, que actualmente lidera Rubén Núñez, y desaparece el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO).

Este instituto era operado y controlado a su libre albedrío y decisión unilateral desde su fundación en mayo de 1992, por la CNTE, que logro la aprobación del decreto de creación presionando a la administración del entonces gobernador, Heladio Ramírez López.

Desde ahí la CNTE controlaba dinero, plazas y a todos los maestros integrantes de su sección, los premiaban o castigaban de acuerdo a su participación activa en las movilizaciones, protestas, plantones, sabotajes, etc, quien no contribuía a la 'causa' le negaba su paga, o le quitaban su plaza de maestro.

Hoy, con la decisión del gobernador Gabino Cue, el estado volverá a ser el rector de la educación en la entidad, los maestros integrantes de la CNTE, tendrán que someterse a los procesos de evaluación a los que están obligados por la reforma educativa que tanto han rechazado y exigido que se elimine, por ser simplemente opuesta a sus intereses económicos y de control político.

La CNTE que nació siendo un organismo opositor al cacicazgo magisterial del extinto Carlos Longitud Barrios, término prostituyéndose por sus dirigencias dada su ambiciosa proclividad a coludirse con autoridades educativas y gobernantes, quienes a través de carretadas de dinero, plazas magisteriales e impunidad en todas sus acciones delincuenciales, lo que les ha permitido crecer y formar un imperio dentro del sistema educativo, tanto estatal como nacional, en detrimento en la calidad educativa de la entidad y del país

Durante décadas los miembros, mal llamados profesores, integrantes de la sección 22 de la CNTE, han tenido secuestrado al estado de Oaxaca en el tema educativo, han dañado profundamente la educación de decenas de miles de niños, pero no solo han causado el gravísimo socavamiento educativo, con sus manifestaciones, movilizaciones y plantones en la capital de ese estado, solo hay que recordar en el 2006, que junto a la organización APPO, tomaron durante un año el centro de la capital del estado, lacerando la economía del sector productivo con la subsecuente pérdida de empleos.

Hoy, con esta acción gubernamental de Gabino Cue, al desaparecer el IEEPO y crear un ente autónomo administrativa y jurídicamente, el estado recobra lo que nunca debió ceder, la rectoría de la educación. Pero en especial, si se tiene la firme voluntad y decisión de aplicar el estado de derecho al ya no permitir más desmanes y actos vandálicos, a esos que los maestros llaman protestas pacíficas, se iniciara la recuperación del sector educativo en la entidad y se podrá trabajar en elevar la calidad de la educación en Oaxaca.

Y no estará de sobra, actuar en igual forma y características en los estados de Michoacán, Guerrero, Chiapas y el D.f., zonas de empoderamiento de la CNTE, donde sus marchas de protestas lejos de ser manifestaciones pacíficas y ordenadas de sus inconformidades, concluyen siendo, en más de las ocasiones, actos criminales.

Confiemos en que no se desfonden.

No que no……..

Tal parece que la probidad política en MORENA no duro mucho en la entidad, específicamente en el municipio de Playas de Rosarito, demarcación en la que los militantes están indignados por la imposición que quiere hacerles un diputado federal que se auto designa como coordinador regional de ese joven partido.

La imposición tiene nombre, Julio García Serna, ex militante del PAN rosaritense hasta el pasado mes de mayo, cuando solicito su baja del padrón, y a quien por oscuras razones del legislador federal, pretende imponer como dirigente municipal.

Observemos si es cierto que no se permite en MORENA este tipo de acciones.

Ironía.......

Es que, el alcalde Jorge Astiazarán, haya tardado la mitad de su gestión en darse cuenta del lastre corrosivo y corrupto, que representa su Secretario de Gobierno, Bernardo Padilla, para su administración.