Rosarito Informa.-“Nada ofende y lastima más a la sociedad en su conjunto, que las malas acciones de sus servidores y funcionarios que estando obligados a un correcto comportamiento oficial de su desempeño, traicionan la confianza que les fue conferida”, expuso el Diputado David Ruvalcaba Flores.
Agregó que algunos abusan de su encargo, tergiversando sus funciones, haciendo uso la mayoría de las veces, de una superioridad jerárquica, que más bien se traduce en la ventaja que la fuerza de la función pública le proporciona a un mal servidor.
Esto fue señalado por el Legislador del Partido Revolucionario Institucional, al presentar ante el Pleno del Congreso, una Iniciativa de reforma que adiciona el artículo 293 Bis del Código Penal para el Estado de Baja California.
De acuerdo a lo establecido por el artículo 288 del Código Penal local, define al servidor público como toda persona que desempeñe algún empleo, cargo o comisión de cualquier naturaleza en la administración pública del Estado o sus municipios, en el Poder Legislativo, el Poder Judicial del Estado, en organismos descentralizados, empresas de participación estatal o municipal mayoritaria, organizaciones y sociedades asimiladas a éstas o fideicomisos públicos.
Por lo que en este sentido este nuevo tipo penal, resulta aplicativo a todos los servidores enunciados en dicho precepto legal, de igual el delito que se pretende con esta iniciativa se subsume al delito de abuso de autoridad.
La finalidad de esta iniciativa, es otorgar una herramienta jurídica en defensa de sus derechos, cuando estos se ven vulnerados con las actuaciones irregulares de las autoridades públicas y en consecuencia lograr contrarrestar la reticencia de los ciudadanos de las actuaciones de los servidores públicos que imparten o administran la justicia.
Tiene que ver con lo que se ha convertido en un clamor de justicia, de orden y de combate a la corrupción en una de las áreas más sensibles dentro de la sociedad, tal como lo que significa todo lo relacionado a la Seguridad Publica, la Prevención del Delito y la Procuración e impartición de Justicia.
Consideró Ruvalcaba Flores que el servicio de la seguridad pública, por su naturaleza debe inspirar certeza y confiabilidad en todas y cada una de sus funciones y en todos y cada uno de sus integrantes ya que en ellos radica la delicada y compleja tarea de garantizar el cuidado y preservación de la paz pública.
Así como la de mantener el orden social, de proteger la integridad de las instituciones públicas y privadas, pero sobre todo, de proteger a todas las personas y sus respectivas esferas de intereses jurídicos como lo son la vida, el honor, la libertad, el patrimonio y la salud o integridad física de todos y cada uno de los individuos que componen la sociedad, concluyó.
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