Al respecto, la subdirectora general médica, Angélica Pon Méndez, mencionó que este fenómeno climatológico suele transportar una gran cantidad de partículas de polvo, virus y bacterias y con ello, provocar enfermedades como alergias, asmas, conjuntivitis, sinusitis y demás afectaciones serias al sistema respiratorio.
“La contaminación ambiental tiene varios efectos en la salud, y puede influir en el deterioro en la calidad de vida, debido a que puede ocasionar desde lesiones leves, hasta enfermedades graves”, puntualizó Pon Méndez.
Agregó que la calidad del aire de la ciudad no es óptima y se puede complicar con las ráfagas de viento, ya que trasladan contaminantes en polvo, por lo que, es necesario tener los cuidados pertinentes.
Algunas de las medidas preventivas para cuidar nuestra salud son evitar el ejercicio intenso ya que incrementa la dosis de contaminantes inhalados; evitar realizar actividades cívicas, culturales, deportivas y de recreo al aire libre; hidratarse continuamente, tomando al menos 1.5 litros de agua al día; no fumar y acudir al médico en caso de sentir molestias.
“El cuidado de nuestra salud es responsabilidad de todos”, finalizó Angélica Pon.
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