Ajo y Agua

Tan malo el pinto, como el colorado

Por: Javy Malacara

Según la página electrónica http://www.refranes.biz  el refrán “Pinto tan malo es el pinto como el colorado”

Es una expresión gnómica del mundo de las peleas de gallos,  que de forma exclamativa significa lo que enuncia. Como variante reza:  tan penco es el pinto como el colorado, en una lengua muy florida los reza de manera tal: tan pendejo el pinto como el colorado

Será que es lo que está pasando en el Instituto Psiquiátrico del estado de Baja California (IPEBC),  primero le echaban la culpa y hasta le descubrieron algunos movimientos financieros turbios al entonces director de la institución, el doctor Luis Enrique Dorantes Marinez que tampoco era una inocente palomita.

 Después ponen a una directora perteneciente al clan “Dorantes-Rico” la afortunada que se queda con el puesto es la doctora Adriana Ruth Balcázar Musacchio,  quien tomara el puesto el 18 de Abril del año pasado, pues a menos de un año la flamante directora saco las uñas y según fuentes de la misma institución, ahora termino por dañar el peculio economía de los empleados.

Pues resulta y resalta que con el pretexto de que administrativamente el seguro popular no les ha hecho los pagos correspondientes, pues estos vivales tomaron el ahorro de los trabajadores, que comienza a principios del mes de octubre,  que en caso de una emergencia los empleados podían disponer de un préstamo y así solventarlo el caso de emergencia.

Lo insultante para los empleado fue que sin consultarle a ellos nunca hicieron los depósitos correspondiente al banco, siendo un dinero que se les descuenta vía nómina y que es de los mismos trabajadores, dinero que se les hizo fácil desviarlo y cometerles un fraude (porque legalmente es un fraude, que si los empleados se pusieran de acuerdo y se trasladaran a la procuraduría de justicia del estado e interpusieran la denuncia correspondiente, de comprobárseles la culpabilidad a esta gavilla que dirigen la institución, pisarían la cárcel como cualquier delincuente, pero como eso no va a pasar pues lo dejamos en una utopía, ya que los empleados que están rentados en dicha institución no tienen dignidad,  porque han sido pisoteados, expuestos, avergonzados y ahora hasta robados, y ellos con la dignidad en el piso).

Pero eso no es todo, también los empleados se dieron cuenta de que los mismos directivos tampoco le habían  depositado a quienes deberían de prestar los servicios médicos a los empleados de la dependencia, así como lo leyó usted mi querido lector, tampoco habían  pagado el seguro de Met Life, el cual también le pegan su rasurada cada catorcena al cheque de todos y cada uno de estos faltos de dignidad, o mejor llamémosles empleados (no vayan a echarme la culpa a mí que les estoy faltando el respeto, cuando se lo han faltado ellos solo, al dejar que esta banda de delincuentes defraudadores hagan con su patrimonio lo que ellos quieren) solo que aquí lo grave es que estaban a punto de suspenderse la atención médica,  pero como algunos empleados se dieron cuenta, pues no les quedo otra que ponerse al corriente y conseguir casi ochenta mil del águila para solventar la problemática.

Pero no solo esto, dicen las malas lenguas (que por cierto les agradezco los correos que me envían), que tienen uno de los vehículos oficiales en el taller desde hace más de dos meses, usted pensaría que si dejando un carro por dos meses estarán cambiándole el motor, sacándole los golpecitos, pintándolo, puliéndolo, vamos haciéndole un kit para dejarlo como decía Don Francisco “nuevo de paquete”, pues ¿qué creeeeeeee? Pues que no, que lo tienen ahí porque ni tienen dinero para comprar las partes y mucho menos para pagarle al mecánico.

Dicen las lenguas bífidas que el Chuy Yáñez se la lleva como la muñeca fea, llorando por los rincones, porque no lo dejan hacer su trabajo como debería, ya que las que quejas están al por mayor por parte de los usuarios, que tanto el hospital, como las oficinas de la dependencia que hieden a heces fecales, lo que no sabes es si ese olor sale de los baños, o de las oficinas de los directivos, la problemática estriba en que no pueden dar con la procedencia del nefasto olor porque no hay dinero para comprar ni una botella de fabuloso, porque el famoso “Chuy” no quiere Pinol, ya que cuando entra a la oficina del director del hospital, el doctor  Salvador Rico, pareciera con la mezcla de olores que alguien defecó en el bosque.

Ha pero eso sí, tuvieron los más de cuarenta mil pesos para irse de gira artística a Panamá, que si bien iban de gorra, los recuerditos, las comidas, las paseos  y algunos lujitos más a quien cree usted que le costaron mi querido lector, pues a usted, y de seguro van a decir que fueron invitados y que les pagaron todo, pero si fue así ¿porque cobrar un cheque para gastos de más de cuarenta mil devaluados pesos? Bueno mi querido lector con esta me despido, la semana que entra les platicare de otra Balcazaventura de estos flamantes directivos de la salud mental  y todos sus secuaces y a los empleadillos de esta dependencia  no les va a quedar de otra que Ajo y Agua, así es Ajo…derse y Agua…ntarse.

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