El gobierno estatal de Baja California pretende erigirse en el gran censor para silenciar las voces que destacan sus malas acciones: NSA

Cero Grados.-Este día he presentado un exhorto a la Procuraduría General de la República, para que a través de la Fiscalía Especializada en Delitos Contra la Libertad de Expresión, abra una investigación al gobierno del estado de Baja California, que encabeza Francisco Vega de Lamadrid, por un tema que afecta a los comunicadores de este estado.

El pasado 11 de noviembre, mediante un desplegado dirigido a la opinión pública, al gobernador del Estado de Baja California, a los diputados federales y a los legisladores locales, entre otros funcionarios, 42 reconocidos periodistas firmaron un desplegado en el que denuncian las acciones de intimidación y chantaje promovidos desde el Gobierno del Estado en contra de las periodistas Adela Navarro Bello y Dora Elena Cortés, directoras del semanario Zeta y la Agencia Fronteriza de Noticias, respectivamente.

Dos comunicadoras con una larga trayectoria de trabajo, que ejercen con valentía el periodismo crítico, el que exhibe e incomoda a las autoridades, son el centro de una campaña orquestada desde el poder, cuyo fin es el sometimiento sin reparar en formas ni recursos.

Adela Navarro Bello y Dora Elena Cortes Juárez  enfrentan una batalla desigual por ejercer a plenitud su derecho a informar y a criticar los desaciertos de una administración donde la transparencia y la rendición de cuentas brillan por su ausencia.

El gobierno estatal de Baja California pretende erigirse en el gran censor para silenciar las voces que destacan sus malas acciones; pretende adueñarse de la decisión de lo que se puede y no se puede publicar, buscando manipular la información, en un burdo esfuerzo por preservar una imagen que no corresponde a su realidad.

Episodios de hostigamiento a la prensa, intentos de obstaculizar su libre desempeño, atentados flagrantes contra su ejercicio a lo largo de la historia, han tenido como contraparte un esfuerzo del estado mexicano por garantizar a los comunicadores de nuestro país, el marco legal que regule y proteja su actividad.

Dentro de ese esfuerzo, y en el marco de las atribuciones legales establecidas con ese fin, es que realizamos el exhorto a las autoridades correspondientes, para que se abra esta investigación.

¿Cuántos casos de abuso y sometimiento se esconden? ¿Quiénes han guardado silencio por no incomodar al gobierno del estado?

- Empresarios hostigados por funcionarios del gobernador.

- Universitarios que han mostrado su desacuerdo por el adeudo millonario del gobierno con la Universidad.

- Políticos de oposición que han señalado las múltiples fallas de la administración estatal.

 - En general, todos aquellos que expresen algún desacuerdo.

Dora Elena y Adela no son mujeres frágiles. Ninguna de las dos renunciará a su valiente postura de ejercer un periodismo crítico, objetivo y veraz. Este movimiento es por todos nosotros.  Así las cosas, el día menos pensado, en el desarrollo de nuestras actividades cotidianas, podemos realizar alguna acción que desencadene la ira oficial. El verdadero riesgo sería que el día de mañana incurramos en una parálisis por temor, otros sectores de la sociedad: académicos, políticos, empresarios, trabajadores, estudiantes....

La postura oficial de apostar por el olvido no debe continuar más. Los comunicadores de Baja California han externado un reclamo al gobernador Francisco Vega de la Madrid, secundada por la sociedad civil.

El paso de la historia es claro y contundente: la sociedad alza su voz cada vez con más fuerza y reclama con toda razón, un alto y un castigo a los abusos perpetrados desde el poder. Y los comunicadores libres y decididos, deben seguir siendo el conducto por el que se expresan esas voces.

Es por ello que presento este punto de acuerdo, para evidenciar lo que sucede en este lugar donde inicia México, en una frontera que en este momento está sujeta al escrutinio nacional por lo que sucede con el vecino del norte.

No puedo omitir que Francisco Vega es un mal gobernador, por eso maquilla su imagen coartando a los comunicadores. Por otro lado, parece ser un empresario exitoso, aunque a decir de Joaquín López Dóriga, no hay congruencia entre sus declaraciones de ingresos y su ostentoso patrimonio. Una cosa es clara: a López Dóriga no lo puede amedrentar o silenciar, como acostumbra hacer en Baja California...