lunes, 15 de mayo de 2017

Expediente Político

Cero Grados.-Por Alfredo Calva 

No aprenden….
Tal parece que la dirección de Inspección y Vigilancia que preside Ricardo Peñaloza, en el gobierno municipal de Playas de Rosarito no aprende ni toma experiencia de sus yerros y omisiones cometidos, sigue realizando las mismas pifias que solo exponen y sacan a relucir su ineficiencia e incapacidad para llevar a efecto a cabalidad la responsabilidad que le asigno la presidenta municipal, Mirna Rincón Vargas.


Solo transcurrieron trece días de la balacera registrada en el antro denominado La Cantina en el que resultó una persona lesionada, para que de nueva cuenta el día de ayer domingo se presentará otra agresión con arma de fuego pero en esta ocasión con el saldo de una persona asesinada.

Desde su apertura el sitio en mención se ha caracterizado por la realización de eventos en los que participan grupos norteños cuyo repertorio musical se caracterizan por hacer apología del delito con los llamados narcocorrido bajo la complacencia de las autoridades locales.

Las riñas en La Cantina han sido una constante, solo que estas no habían trascendido hasta el pasado primero del mes en curso cuando por primera ocasión no solo salieron a relucir las armas de fuego, sino que, fueron detonadas y tuvieron a su primer lesionado por arma de fuego.

Por este incidente que se registro cuando el antro trabajaba fuera de horario permitido, la dirección que encabeza Ricardo Peñaloza, y la Secretaria General de Gobierno, ente del cual depende Inspección, decidieron, para cubrir las apariencias de no estar enterados de la operación del lugar hasta la hora en que saliera su ultimo cliente, aplicar una sanción económica que al ser cubierta haría que todo tornara a la normalidad y a olvidar el incidente.

Todo transcurrió como lo planearon Peñaloza y su superior jerárquico, Jorge Arévalo, ya había pasado el vendaval que generó la balacera y
habían quedado bien con su jefe de facto, Jesús González, cuando de nueva cuenta, surge un problema de seguridad en el centro de diversión La Cantina y asesinan a un joven, lo que ratificó lo que mostró y demostró el primer incidente, que en ese antro al igual que en la mayoría de los que operan en Rosarito, no existen problema alguno para que a los asistentes ingresen armados.
Lo anterior, es solo una muestra de los que se vive n el quinto municipio en materia de seguridad, la prevención no existe, ni de manera oficial a través de la policía municipal, cuyos elementos han sido desfasados por la delincuencia común ya sea por omisión o colusión o, en el ámbito privado, como lo son los giros negros.

La realidad que padecen los rosaritenses día con día esta a punto de colocarlos en los índices delictivos de los años 2007-2009, la situación esta fuera de control, el titular de la policía municipal, Magdaleno Vázquez Luis, solo es una marioneta que utilizan como figura decorativa quienes de manera soterrada manejan y operan la dependencia.

La titular del ejecutivo, Mirna Rincón Vargas, se encuentra al borde de que se le vaya de las manos el gobierno que encabeza, la seguridad es el tema más sentido y que lacera a sus gobernados, fue su mejor promesa durante su campaña electoral, que de no atender con rapidez, diluirá el resto de las acciones que lleve a efecto en favor de sus conciudadanos.


Y mientras tanto….
Los organismos empresariales acuerdan acciones conjuntas para hacer notar a las autoridades de los tres ordenes de gobierno, su preocupación por el desborde de la inseguridad que se vive en la entidad y que genera perdidas económicas y de confianza de futuros inversionistas, por lo que exigirán a estas que ya se dejen de hacer simulación en la coordinación y en verdad actúen en el combate de este cáncer social.

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