Al respecto, el secretario de Educación, Gerardo Arturo Solís Benavides comentó que fueron 798 pares de lentes que se entregaron a niños y jóvenes que tienen deficiencia visual, mejorando así su calidad de vida, reduciendo la reprobación, la deserción y elevando el aprovechamiento escolar en el Estado, además es un apoyo a la economía de los padres de familia que en algunos casos no cuentan con los recursos para adquirirlos.
En este tema, la delegada Jessica Jesús Zavala Sámano explicó que el proceso para la detección de los alumnos y alumnas inició en el plantel educativo a través del maestro que juega un papel fundamental en la identificación temprana de los problemas de la vista de los estudiantes, posteriormente los menores detectados son revisados con estudios especializados por optometristas en la etapa de detección fina y así determinar qué alumnos son los que necesitan anteojos.
Entre los principales problemas de agudeza visual que presentan los estudiantes de primaria y secundaria son la miopía, hipermetropía y astigmatismo, mismos que son un factor que limita el aprovechamiento escolar.
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